Genesis 1:14 ~ 15. "Y dijo Dios: Sean lumbreras en la expansión de los cielos para apartar el día y la noche: y sean por señales, y para las estaciones, y para días y años; Y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra: y fue."

De Uriel el angel, recibió de primera mano Enoch, los planos divinos para construir la primera maquina gnóstica de observación de cuerpos celestes, el primer planetario de la civilización, "La Máquina de Uriel".

De dicha observación Noe leyó las "señales" que daban advenimiento al "Gran Diluvio".

De un viaje somnoliento en autobús, de unos rayos de sol a través del follaje de unos árboles proyectándose sobre su rostro en movimiento, Brion Gysin recibió la proyección divina para construir su propia máquina gnóstica de elevación de conciencia, "The Dream Machine".

De un viaje de 20 minutos en auto entre Leipzig y Röcken, Alemania. Novelo llevó de ofrenda una "Flor Roja" a los restos mortales de Nietzsche. En el camino escuchó dos veces seguidas "Waiting for the Flood" de Love & Rockets.

ESG son las siglas de "EMERALD SAPPHIRE & GOLD"
ESM son las siglas de "EARTH SUN MOON"

"ESM: Earth Sun Moon" es un tríptico de gráfica digital de Txema Novelo, que se presenta del 16 al 28 de enero 2017 en la Galería La Esperanza, en la colonia San Miguel Chapultepec en la Ciudad de México.

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La LEtra E Está por doquiER
–Abraham Cruzvillegas

A la vuElta dE mi casa había un sEñor apodado El Guama. Como Él y su Esposa hacían limpias, siEmprE pEnsÉ quE su apodo vEnía dEl ancEstral dEnominador guama para El chamán, El curandEro, El hEchicEro, pEro En rEalidad procEdía dE la vEnta dE cErvEzas tamaño familiar –conocidas popularmEntE como caguamas- En la trastiEnda dE Rosa Cruz, su pEquEña miscElánEa, un changarrito En El quE ExpEndía chilEs jalapEños a puños, cuEritos Encurtidos por docEna y charritos dE maíz, adEmás dE otros productos dE primEra nEcEsidad. El místico nombrE dE la tiEndita Era tambiÉn El nombrE dE la consortE dE El Guama, a quiEn apodaban –obviamEntE- Doña Caguama. PEro como sEa, cuando mi mamá mE mandaba a comprar un cigarro RalEigh suElto y unos chiclEs Motita, nomás dE cruzar El umbral quE sEparaba –o unía- su intErior dE la callE, sE sEntía una vibrota. En sus parEdEs dE tEjamanil sE había imprEgnado El olor a tabaco y a borracho; El piso, dE tiErra suElta, Estaba llEno dE cErvEza y asErrín; pEro lo más raro En EsE lugar Era la música quE Escuchaban los parroquianos, compuEsta por una playlist En cassEttE dE las cosas más disparEs. REcuErdo vagamEntE Esclavo y amo, dE Los PastElEs VErdEs, El saucE y la palma, dE Luis PÉrEz MEza, una vErsión dE Jacinto CEnobio por Los MasiosarEs, Flor dE capomo, dE Ramón Ayala y sus Bravos dEl NortE, ME caí dE la nubE, dE CornElio REyna, El RopavEjEro, dE La DulcE Rosario y sus SEpulturEros, El Tributo a los BEatlEs, dE XaviEr Passos, Dos crucEs, dE Emilio DomínguEz y sus EstrEllas dE Plata, ¿DóndE tE agarró El tEmblor?, dE Chico ChÉ y la Crisis, o QuiEro huir dE mí, dE Los TrEs CaballEros, lEgEndario trío dondE hacía gala dE su virtuosismo En El rEquinto El bohEmio Chamín CorrEa y componía las mElodías RobErto Cantoral, nuEstro LibEracE. El cantantE dE EsE trío Era LEonEl GálvEz, un acapulquEño apasionado quE tambiÉn formó partE dE las agrupacionEs Los CalavEras, Los ArribEños, Los ValEntinos y Los TrEs REyEs. LEonEl GálvEz Era igualito a El Guama, pEro En chiquito.

El Guama –quiEn murió al rEsbalar En una barranca cErcana a mi casa, rEgrEsando cuEsta arriba dEspuÉs dE buscar la flor dEl gordolobo para curar a un vEcino dEl mal dEl corajE- solía hacEr buchEs dE cErvEza quE bEbía a pico dE botElla, la tragaba y Eructaba sonoramEntE, ‘pronunciando’ palabrotas al tiEmpo. LuEgo jalaba mocos con EstruEndo y avEntaba gargajos sobrE El piso, componiEndo patronEs abstractos quE con El tiEmpo, aprEndí a dEsEntrañar. Uno dE Ellos dEscribía, al modo arbitrario dE quiEnEs vEn En las constElacionEs formas divErsas, una mEzcla dE uno dE los instructivos dE bailE quE Andy Warhol rEprEsEntó En una dE sus sEriEs dE sErigrafías sobrE tEla, y un diagrama EsotÉrico quE rEfEría al árbol gEnEalógico dE Ras Tafari MakonnEn, mEjor conocido como HailE SElassiE, EmpErador dE Etiopía -hErEdEro En línEa dirEcta dEl rEy Salomón y la rEina dE Saba-. EstE último, En junio dE 1954, visitó MÉxico, y sE EntrEvistó con El gEnEral Lázaro CárdEnas, inauguró la gloriEta dE Etiopía En la Colonia dEl VallE, y asistió a una novillada En El LiEnzo Charro La Tapatía. DEspuÉs dE unas diEz flEmas, al ritmo dE la canción En turno –tal vEz SortilEgio, con Antonio Badú-, El Guama rEalizaba una EspEciE dE corEografía, como uniEndo puntos, dando pasitos Estrambóticos, inclinándosE y EndErEzándosE sobrE su propio EjE, al Estilo dE Johnny RottEn Emulando al jorobado dE NuEstra SEñora dE París, y luEgo a GEnEsis P-OrridgE, o a Rigo Tovar, dando brinquitos Espasmódicos abriEndo las piErnas, haciEndo pEnsar a todo mundo quE ya Estaba muy intoxicado, pEro muy probablEmEntE, En rEalidad Estaba cElEbrando algún ritual curativo, una limpia contra El mal dE ojo, o simplEmEntE sE Encontraba En un Éxtasis místico, como San Ignacio dE Loyola En ManrEsa.

Uno dE los hijos dE El Guama, a quiEn conocí biEn En la tEmprana juvEntud, Era lídEr dE una pandilla dE muchachos quE sE hacían llamar Los SEx ToloachEs Punk, y sE hizo adicto a inhalar pEgamEnto para zapatos, cosa quE hacía sEntado En la banquEta dE la Esquina dE mi cuadra, miEntras Escuchaba música EstridEntE a todo volumEn, En compañía dE los otros miEmbros dE su clan –su banda- azorando a niños y adultos, quiEnEs tErminaron por sEgrEgarlos, ignorándolos. JosÉ María, aquEl adolEscEntE dE quiEn nunca volví a sabEr nada y quE sE vEstía con pantalonEs Entubados, chamarrita dE cuEro nEgro, tEnis ConvErsE All-Star, pEinado siEmprE dE copEtito dE lado o Engomándolo En crEsta sobrE la tEsta, fuE apodado durantE su infancia El Guamita, pEro una vEz forjada su propia fama, sE autonombró sEncillamEntE El ChEmo, EpítEto quE sonaba rEcio En los toquinEs quE sE organizaban En El Mictlán, El clandEstino hoyo fonqui dE atrás dE la iglEsia dE La REsurrEcción. Ahí, –Emulando a su alcoholizado padrE- danzaba frEnÉtico dando giros En El airE, bailando El pogo y El trisol, al ritmo dE TNT, dE Atóxxxico y SíndromE d’Punk, siEmprE Empuñando su bolsa dE plástico transparEntE, inflada y amarilla, o al mEnos su mona dE thinnEr, al quE por alguna razón, ni tan mistEriosa, sE lE llama coloquialmEntE activo. LuEgo dEsayunaba quEsadillas dE flor dE calabaza y huitlacochE, sEntado En su Esquina dE siEmprE, miEntras tararEaba quEdito una canción quE no sE acordaba dóndE había Escuchado, ni cómo sE llamaba, pEro quE vEnía siEmprE a su mEntE dEspuÉs dE lEvitar En El hipErconciEntE, y quE dEcía más o mEnos así:

Sufrir ya no Es posiblE
ay dios EtErno mEjor yo quisiEra morir
porquE En EstE mundo Engañoso
todo Es un suEño todo Es una ilusión.

Tres veces tres
–Gabriela Jauregui

La trenza de líneas
(triangulación de música silenciosa)
Nombrar en triple,
Toda una tradición:
Tierra, Viento, Fuego,
Esmeraldas, Oro y Safiros,
N______ con actitud
El culto de la ostra azul
Los pilotos del templo de piedra
Emerson, el Lago y una Palmera
La resurección del aguaclara de Creedence
Los chavos de la tienda de animales
Destruyan a todos los monstruos
No más fe…
Yo la tengo (¿o no?)
Y en este caso, el trípitico tripeado
los cohetes y el amor y Novelo
colorean
La Esperanza

–Bruno Darío

No es tuyo ese brillo. Pero tan bello te queda, que podemos compartirlo. Para así, cuando la que llaman noche -sabes, para nosotros eterno baile solamente- pese sobre sus hombros, ora cansados, ora de fiesta, puedan reconocer el rostro y la forma de aquello que aman. La flama, sabes, es más dulce cuando tú finges mi fulgor. Las aguas del pecho rugen ante ti, redonda. Las cosas se mueven distinto, sabes, al aparecer sobre su cuello tu mirada nívea.

 Hoy duermo temprano, reflejo mío; cuida de ellos, sabes, sufren lo oscuro.